Hola, buenas noches, hoy venía a hablarles de las series de animación infantiles, estas son unas series que cada vez que las veía me dejaban flipado, por ejemplo Doraemon, si Doraemon. Miren a mí el chico protagonista el gafotas este, si joder como se llama, mmm… Nobita, a mi ese niño me parecía subnormal, si y les voy a explicar el porqué, es decir, tú tienes un gato que tiene un bolsillo sin fondo lleno de cualquier cosa que puedas imaginar, coño no le pidas un “gorrocoptero” gilipollas pídele una rubia tetona, un Ferrari y la plaza de toros de Las Ventas llena a rebosar de billetes de 500€, además si tienes mala suerte y la rubia se pira con el dinero y el coche le puedes pedir un abogado honrado (se lo tendría que pedir al Doraemon porque abogados hay muchos pero lo de honrado ya seria fantasía). Otra serie que me flipó también fue Oliver y Benji, si lo pensáis bien esos chicos si no se hubieran ganado la vida con el fútbol hubieran tenido trabajo garantizado. Vamos a ver esos chicos en un capitulo sacaban, en otro si eso hacían un ataque que por supuesto fallaba, en el siguiente les hacían otro ataque a ellos y ya en el último hacían ellos otro contraataque y a lo mejor marcaban, coño estos tíos cumplen todos los requisitos para funcionarios. Otra cosa que me llamaba la atención era la capacidad que tenían los arquitectos e ingenieros de la serie para elegir donde sitúan el campo, es decir, el tío se hace 5 años de carrera (suponiendo que sacase todos los cursos a la primera) para terminar situando el campo en… ¡¡¡el puto pico de una montaña!!! Imagínate a sus compañeros:
-¿ponemos el campo de los niños en la llanura?
Y él:
- no en el pico de la montaña para que se jodan.
Ese hombre odiaba a los niños. Además que ellos lo notaban ¡coño iban corriendo hacia el otro campo y parecía que la portería salía del suelo! Y si el portero daba un patadón al balón y salía para arriba, en la siguiente imagen se veía como el balón iba a ras del suelo al lado de un jugador ¡joder eso es porque está sacando cuesta arriba o ese chaval pega un efecto de la ostia al balón y debería estar de delantero! Otra serie que también me impacto fue Marco, ese chico era aún más gilipollas que el Nobita ese, me explico, si yo tuviera que saber donde se ha ido mi madre y tuviera como posibilidad todos los países del mundo no me iria mirando de país en país ¡la llamaría al móvil joder! Coño que es otro operador y otro país y te sale por un riñón la llamada pero es menos de lo que te has gastado en billetes de avión pedazo de memo. Bueno yo creo que al final el chico se hizo yonky ¿no le veis que iba todo el día con el mono? Además el chico se nota que era italiano porque apuntaba maneras para capo de la mafia. ¿Qué pasa no me creéis? Analicemos la canción que le canta a su madre: si no vuelves pronto iré a buscarte donde estés, no me importa donde vayas… te encontraré, si eso no es una amenaza de muerte yo soy Spiderman. Bueno y ya para finalizar quería hablarles de Pokemón, esa serie fue la que más me marcó, por ejemplo el protagonista llevaba de acompañante a una especie de ratón eléctrico amarillo al que entendía a pesar de que solo sabía decir pika, pika, pika que digo yo coño pues ráscate ¿no? Y luego siempre acababa con un pika, pika, pikachú y yo decía ¡Jesús! Yo recuerdo en una de las muchas pelis que sacaron sobre estos fascinantes a la par que curiosos bichitos, decían que vinieron del espacio. Yo esto me lo imagino así: El profesor le explica a los alumnos que tienen para elegir de viaje de fin de curso Cacaperro 8 o la llamada Tierra. Claro en la tierra hay alcohol y el otro planeta os podéis imaginar que a Eau d’Toilete no olía precisamente ¿Dónde iban a ir los chiquillos? Es como si a nosotros nos diesen a elegir entre ir a Ámsterdam o a las alcantarillas del Vaticano creo que todo el mundo tiene claro a donde iría… y el que no es un tío muuuuyyyy raro. Solo quiero pedirles una cosa para terminar. Cuando miren a sus hijos, sobrinos, hermanos pequeños y demás allegados infantes viendo en la tele algunos de esos dibujos de ahora, antes de criticarlos acuérdense de que ustedes también fueron niños y sobre todo de los dibujos que veían.